“Los arándanos me crecieron 75 cm el primer año. Es un producto de calidad que me facilita el cultivo”.

“Los arándanos me crecieron 75 cm el primer año. Es un producto de calidad que me facilita el cultivo”.

“Puede que lleve usando la maceta inteligente entre quince y veinte años.

Seguramente lo mejor es el tamaño de la planta. Los arándanos me crecieron 75 cm el primer año. Vamos, algo astronómico. Me han dicho que se tarda entre seis y siete años en conseguir una planta de ese tamaño en tierra.

Con la poda radicular, en la maceta inteligente obtenemos un sistema radicular que llena la bolsa, de 35,5 cm de profundidad, y en un arándano normal plantado en tierra la raíz solo mide unos 15 cm.

Por tanto, obtenemos posiblemente un sistema radicular diez veces mayor en la maceta inteligente que en tierra. La maceta inteligente forma el sistema radicular. Así se consigue un sistema de raíces más grandes, mejores, más fibrosas y nutríferas. Las raíces más nutríferas producen más frutos.

Más frutos y más grandes. Y más dulces. Es porque bajo la planta hay el suficiente sistema radicular como para sostener toda la cantidad de frutos que produce.

No hay que regar la planta de más porque la bolsa es porosa y el agua se sale del fondo. La maceta inteligente controla el agua.

Otra clave importante, muy importante, de la maceta inteligente es que libera el calor. En pleno verano, a altísimas temperaturas, la maceta inteligente libera el calor. Con la corriente de aire dentro de la bolsa y a través de la tela, produce un enfriamiento por evaporación en el sistema radicular. Una simple maceta de plástico negro retiene y refuerza el calor.

También han durado mucho más de lo que esperaba en realidad. La verdad es que pensaba que los rayos solares ultravioleta les iban a afectar un poco. En esta finca tengo unas macetas inteligentes de 56,8 litros que llevan aquí siete u ocho años al sol, en invierno, cuando hace frío o calor, y ahí siguen.

Es un producto de calidad que me facilita el cultivo. No podría hacer lo que hago sin Smart Pots. Sería imposible.

Y hacen que uno se lo pase bien cultivando. Se pueden plantar las cosas sin mancharse. Al plantar en tierra hay que batallar con la maleza, la hierba y todo eso, pero cuando se planta en una maceta inteligente no se tienen esos problemas.

¿Hay que mudarse de casa? Se mete el jardín en una furgoneta de mudanzas y adiós. Algunos clientes míos lo han hecho”.